Panorama político bonaerense: Se busca oposición

La Plata (Por Fabricio Moschettoni, de Impulso Baires) – En la semana abreviada que termina, lo más destacado en ámbito provincial giró en torno a la decisión oficial de sacar a la calle a 1500 policías, que actualmente cumplen tareas administrativas, y ellos serán reemplazados por dos mil administrativos que se van a tomar en los próximos días. La semana entrante visitará la Cámara de Diputados, el ministro de Economía Amado Boudou, en una suerte de comienzo de desembarco de funcionarios nacionales a la Legislatura. Además, todo el panorama político, en donde como título se puede decir que mientras el oficialismo comienza a perforar los 50 puntos de intención de votos, se busca oposición.

Quizá la noticia más renombrada de una semana brevísima tiene que ver con movimientos en Seguridad. Allí al fin se tomó la medida de habilitar en calle a 1500 policías más aproximadamente. Se trata de efectivos que hasta ahora cumplen tareas administrativas, quienes en un tiempo breve serán reemplazados por dos mil nuevos agentes de la administración pública, que la cartera dirigida por Ricardo Casal tomará en los próximos días. Solo trascendió que se abrirá el llamado para personas con estudios secundarios completo que tengan entre 18 y 35 años.

Al mismo tiempo, el gobernador Daniel Scioli, -que hizo un fin de semana serrano- participó de una visita en Torquist, y allí anunció la puesta en funcionamiento de una Fiscalía descentralizada, que comenzará a funcionar la semana venidera, y también entregó algunos vehículos para la lucha contra el delito.
En tanto, Santiago Montoya, titular del Grupo Bapro y encargado de llevar adelante el proyecto de regionalización bonaerense, pasó por la Legislatura porteña y en un panel expuso sobre la necesidad de crear la Región Metropolitana: “cuando pensamos en la Regionalización y en la Descentralización, proyectamos cómo combatir una concentración que se traduce en hacinamiento, inseguridad, colapso de servicios públicos y contaminación ambiental”, definió Montoya, en tanto remarcó que “lo que proponemos es un nuevo paradigma de Estado, más cercano al ciudadano”.
La combinación de resolver temas inmediatos, como la inseguridad, y proyectar otros que componen la agenda de la gestión pública de los próximos meses, como la regionalización, tuvieron su lugar esta semana, a los que se le agrega la introducción de otro eje, esta vez por parte del titular del Instituto de la Vivienda, Gustavo Aguilara, quien ayer en el programa “Volviendo al norte”, por radio Simphony (91.3) de San Isidro, mencionó la situación habitacional y la necesidad de que la parte privada participe para la resolución de la temática:”en una charla que tuvimos con el gobernador Daniel Scioli hablábamos de la dificultad de construir, más allá de que la construcción a nivel nacional es record, histórica. Entonces, lo que estamos pensando, para aumentar la cantidad de vivienda es trabajar sobre los sectores privados que puedan ofrecer tierras en cuotas a muchos años, como pasó hace algún tiempo. En muchas localidades se pudo hacer así” razonó.
En tanto, el miércoles venidero comenzará en la Cámara de Diputados bonaerense una seguidilla de visitas de funcionarios nacionales al bloque del FpV / PJ, y el mismo será inaugurado con la presencia del titular del Palacio de Hacienda, Amado Boudou. El coordinador de esos encuentros entre Nación y Legislatura es el presidente de la Cámara Baja, Horacio González, y los mismos se extenderán hasta octubre venidero.


Aguas agitadas


Las aguas de la política partidaria en año electoral están sumamente agitadas entre los opositores, y mientras tanto, el oficialismo trata de articular lo más que puede para que ninguna de sus situaciones internas eclosionen la construcción de octubre próximo.
En el oficialismo hay una seguridad y al mismo tiempo la sombra de una ausencia. La primera parte la constituye el alto índice de adhesión que tiene la gestión nacional, y además la popularidad de la actual mandataria, Cristina F. de Kirchner, que está perforando en la proyección de votos la barrera virtual de los 50 puntos. Pero el problema subyace en la ausencia que dejó el ex presidente Néstor Kirchner, y que ahora empieza a notarse con más profundidad, y tiene que ver con la carencia de un plan B. El actual modelo político no preparó una sucesión en el poder que no sea de la corriente patagónica, es decir que todo indica que va a ser Cristina o Cristina.
Con luces de alarmas en el terreno de la construcción política que se prenden y apagan de modo constante, en el oficialismo están más preocupados por lo que sigue luego de octubre que por las elecciones en sí. Tal vez por esa razón funciona a la perfección el abanico movimientista, es decir, lograr adhesiones por izquierda y derecha, haciendo entrar a todos absolutamente. “Hay que gestionar, hay que gobernar, para eso es necesario contar con gobernadores e intendentes, sea cual fuera su pasado inmediato”, repiten incansablemente los constructores del poder.
Igualmente, la solidez electoral la están reflejando todas las encuestas. Desde hace varios meses, en esta columna venimos repitiendo que el oficialismo actual siempre está más cerca del 50% que de caerse por debajo del 40%, como era el deseo de grupos opositores y así limar diferencias y terminar en balotaje.
Según un sondeo nacional de ARESCO, consultora que dirige el sociólogo Julio Aurelio, sobre 3200 casos en todo el país, y que corresponde a principio de este mes, en voto proyectado, la actual mandataria obtendría el 49.9%, contra 14.2% de Eduardo Duhalde, 12.7 % de Mauricio Macri, 9.6% de Ricardo Alfonsín, 6.9% de Pino Solanas, y 6.6% de Elisa Carrió.
Entre algunas observaciones de su trabajo, Aurelio consideró que desde hace un año la Presidenta superó la barrera de los 40%, y que eso se observó con mayor claridad luego del fallecimiento de Néstor Kirchner, pues anterior a eso, todos los trabajos giraban en torno a una posible candidatura del ex presidente.
En territorio bonaerense también los números son muy favorables al oficialismo. El actual mandatario Daniel Scioli logra el 44.7%, seguido de Francisco De Narváez con 24.9%, y Martín Sabbatella con 10.8%. Luego viene la diputada Margarita Stolbizer, con 9.4 % de adhesión. Como se puede observar, entre Scioli y Sabbatella, -dos versiones que se referencian con el oficialismo nacional-, superan el 55%. También Aurelio midió una posible postulación del intendente de Tigre, Sergio Massa, y estaría rondando los 10 puntos. Y lo curioso ahí es que esa virtual participación no mellaría los intereses ni de Scioli como tampoco de Sabbatela.
En tanto, por estos días hay también algunas actividades políticas producto del reacomodamiento de piezas en el oficialismo. Así es que la rama sindical, con Hugo Moyano a la cabeza, prepara una multitudinaria concentración callejera para horas antes del 1ero de Mayo, Día Internacional del Trabajo, y sostienen que reunirán alrededor de medio millón de personas.
Otros movimientos internos pejotistas pasaron por el lanzamiento de la agrupación C.A.N.P.O., del ministro de Agricultura Julián Domínguez; y el lanzamiento en Necochea del primer candidato alistado en el Frente Renovador Peronista, que lidera el intendente de La Plata, Pablo Bruera. En la ciudad costera, y con la presencia del diputado Gabriel Bruera, los renovadores peronistas presentaron a José Luis Vidal para dar pelea por el sillón comunal, que hoy ocupa el radical Daniel Molina, pero según varios sondeos desde hace tiempo viene en una pendiente electoral, y quizá por eso deja a un storanista como Alberto “Beto” Esnaola, para esa riesgosa batalla. Molina, en tanto, pretende una banca en la Legislatura, y lo piensa hacer de manos del alfonsinismo.


Opositores, se buscan

Ante el visible panorama desfavorable, la oposición trata de avanzar un paso pero la realidad los hace retroceder diez. Sin embargo, en cada movida hay ganadores y perdedores.
La desintegración del Peronismo Federal como opción electoral va de la mano de un estancamiento del jefe del Pro, Mauricio Macri. La ausencia de articulación en esa dirección se suma a lo dubitativo del ex presidente de Boca para decidir su futuro. En ese marco, las aguas están divididas, y hay allegados suyos que insisten con que dará la batalla por la presidencial, dejando en Gabriela Michetti la pelea por la Ciudad, mientras que otros dicen que terminará planteando su reelección, para así intentar contener el único bastión de gestión que tiene su movimiento.
Paralelamente a lo que ocurre en el Peronismo Federal, los panradicales atraviesan el peor momento, y ambos espacios parecen contar con la misma receta de autodestrucción masiva.
Una mala jugada hecha a plena luz del día por parte de Ricardo Alfonsín, al intentar una alianza con el líder de Unión Celeste y Blanco, Francisco De Narváez, aceleró el proceso de descomposición en el diálogo tanto con la líder del Gen, Margarita Stolbizer, como con los socialistas de Hermes Binner. Posiblemente, esa movida desacertada, llevó a que los radicales tuvieran que lidiar con potenciales socios pero también con una vieja competidora/aliada que resucitó: Elisa Carrió.
Mientras en el radicalismo el senador Gerardo Morales y el titular partidario Ángel Rozas, aceleraban la marcha para entrelazarse con peronistas como De Narváez, y trazar línea con Ramón Puerta, entre otros, desde la Coalición Cívica de Elisa Carrió vieron el momento, y allí el diputado Juan Carlos Morán, candidato a gobernador, y la titular partidaria, diputada Maricel Echecoin Moro, calificaron de “vergonzosa”, a la actitud de sus ex correligionarios, y le propinaron un rosario de viejas facturas, en donde también “cobró” el ex senador Leopoldo Moreau, referente aliado a Alfonsín y que hace horas consideró que la UCR no puede sumarse a la “derecha”, y ejemplificó citando a la actitud que tendrían los carriotistas en el Parlamento. La embestida arista provincial también tuvo su réplica en La Plata, y desde allí el titular partidario, Ricardo José Ferrer manifestó su coincidencia con Morán y Echecoin, y además recordó la vinculación entre Moreau y De Narváez: “hace unos meses el empresario compró y donó al comité bonaerense el auto que era de Ricardo Balbín”, y agregó: “la UCR está en las mismas manos que en el 2001”.
Entre los Lilitos miran entusiasmados el panorama radical, y dicen que “punto perdido por Ricardo, en sus movimientos torpes, son ganados por Lilita”, y destacan: “si se miran bien la evolución de las encuestas se puede observar que hay una transferencia de votos de la UCR oficial a la CC”.
El razonamiento de lo carriotistas no está tan lejos de la realidad, aunque por algunos momentos es cierto que pecan de optimismo exagerado. De todos modos, y para agregar incertidumbre, en algunas encuestas que tienen como centro la ciudad de La Plata, Mar del Plata o Bahía Blanca, Lilita Carrió está superando a Alfonsín.
En el medio del panorama desalentador para los radicales, el jefe comunal de San Isidro, Gustavo Posse, aplaudió desde su distrito una posible combinación entre Alfonsín como candidato presidencial y De Narváez para la gobernación. En su declaración Posse no lo dijo, pero ese interés responde no solo a una cuestión de su distrito, sino que tanto él como otros intendentes filoradicales creen que es la única forma que tiene el centenario partido de frenar la huida de voluntades que están teniendo nuevamente. El razonamiento obedece a lo siguiente: “si no ofrecemos algo medianamente competitivo perdemos varias comunas. Ya son más de diez que están en la cuerda floja. Si entre Cristina y Ricardo hay más de 25 puntos de diferencia, vamos a poder retener muy pocas”, dicen.
Quizá por esa observación hay intendentes que ya claramente se abrieron de la campaña oficial radical, y otros, como Pablo Guacone de San Pedro, que miran con optimismo a la Rosada y a la Gobernación sciolista, vía su buena relación con la cartera de Planificación, que lidera Julio De Vido.